En los tiempo que corren, no haber sido madre antes de los 38 años se convierte en una carrera llena de obstáculos para intentarlo a toda costa. El inconveniente viene cuando ves a tu alrededor que se puede ser madre a edad tardía sin ningún problema añadido a la edad, solo que nadie te cuenta cual es realmente la letra pequeña.
No hay que olvidar que la causa
principal de infertilidad asociada a la edad en la mujer, es la baja reserva ovárica
(a partir de los 35 años, comienza a haber una notable disminución de óvulos
presentes en los ovarios, así como de la calidad de éstos). Es
verdad que de forma natural se dan casos de una maternidad esplendida alrededor
de los 40 pero no es lo común ni mucho menos, la mayoría. Y es que, cuando te
planteas ser madre, por ejemplo sin
tener un papá para tu hij@ o después de llegar a un cierto nivel profesional,
de repente te das cuenta que tu fertilidad no es la optima para concebir.
Te cuesta renunciar a serlo por ti misma
o a recibir ayuda externa e incluso a acudir a la donación. Sin embargo, deseas
sentir un embarazo, parir a un hij@ y sostener a tu bebé entre los brazos, para
disfrutar de una maternidad plena, como cualquier otra mujer. Es en ese
momento, cuando tus esquemas se vienen abajo y aquello que durante años le has negado
a la naturaleza se vuelve imprescindible en tu vida. Te sientes vacía, tu mente viaja sin rumbo en el horizonte porque quieres ser mamá pero ya no tienes más tiempo para empezar a intentarlo de forma natural. Piensas que puede ser demasiado tarde.
El “Objetivo: ser mamá” algunas
veces parece olvidarse en la vida de una mujer porque antepone muchas otras
cosas al de su instinto maternal. Pero tarde o temprano,
éste se manifiesta y hay que tener muy presente que llegado ese momento, puede
ser tarde para engendrar un hijo propio o simplemente para conseguir
embarazarse con éxito.
Afortunadamente, en materia de reproducción
asistida la ciencia ha avanzado muchísimo y existe la generosidad de quienes donan
para los demás, la materia prima: óvulos, semen o embriones ya fecundados.
Yo he sido mamá a los 43 años
llegando a la meta con dificultades.
Hoy por hoy, estoy encantada con mi nueva vida y aunque a veces en la crianza me flaqueen las fuerzas por la edad, volvería a pasar por todo el tratamiento sin dudarlo un minuto. No obstante, solo me arrepiento de una cosa… Haber esperado tanto para decidir con el coraje suficiente ser madre, sobretodo porque muy posiblemente hubiese tenido más de un embarazo.
Hoy por hoy, estoy encantada con mi nueva vida y aunque a veces en la crianza me flaqueen las fuerzas por la edad, volvería a pasar por todo el tratamiento sin dudarlo un minuto. No obstante, solo me arrepiento de una cosa… Haber esperado tanto para decidir con el coraje suficiente ser madre, sobretodo porque muy posiblemente hubiese tenido más de un embarazo.
Y me quedo con la enorme satisfacción de haberlo intentado todo!
GRACIAS a todo aquel que me ayudó en
el camino…
Has sido toda una guerrera luchando por tus sueños,yo también me di cuenta tarde,que la naturaleza es sabia.......
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